Amnistía Internacional Argentina ha publicado el informe “Muteadas: el impacto de la violencia digital contra las periodistas”, revelando que el 63,5% de las periodistas mujeres y con diversas identidades de género en Argentina han sufrido algún tipo de violencia digital en los últimos seis años. La mayoría ha enfrentado insultos y hostigamiento, y un porcentaje significativo ha experimentado acoso sexual y amenazas de violencia sexual y física.
El estudio, basado en encuestas a 403 periodistas y 36 entrevistas de todo el país, destaca que la violencia de género digital busca disciplinar y silenciar a las periodistas que expresan sus opiniones, especialmente en temas de género. Las plataformas digitales, que en un inicio democratizaron el acceso a la información y funcionaron como aliadas de las periodistas, se han transformado en espacios que amplifican los discursos de odio y la violencia de género contra las periodistas. La violencia digital tiene un impacto significativo en la libertad de expresión, la salud mental y el ejercicio profesional de las periodistas, provocando en muchos casos autocensura, al decidir limitar su participación o expresión sobre ciertos temas o incluso, desactivar o eliminar sus cuentas online de forma permanente a pesar de constituir un ámbito esencial para difundir su trabajo.
Además, el informe revela que las víctimas de violencia de género online enfrentan serias dificultades para acceder a la justicia. La respuesta insuficiente del Estado desalienta a las mujeres a denunciar, ya que solo el 7% de las encuestadas ha hecho una denuncia formal. Esto refleja la percepción de que el Estado no adopta medidas necesarias para abordar la violencia digital de manera efectiva y brindar soluciones a las víctimas.